domingo, 28 de abril de 2013

CÁNDIDO MÉNDEZ CENSURA LA ACTITUD "RESIGNADA" DEL GOBIERNO SOBRE EL PARO


Reclama un gran acuerdo político y social para proteger el empleo y las pequeñas y medianas empresas

   VALLADOLID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

   El secretario general del sindicato UGT, Cándido Méndez, ha reprochado este domingo la actitud que mostraron los representantes del Gobierno de Mariano Rajoy en la rueda de prensa del Consejo de Ministros del pasado viernes al asumir "de manera resignada e impotente" que la tasa de desempleo no bajará del 26 por ciento hasta el final de la Legislatura.
   Méndez ha intervenido en el acto de clausura del VI Congreso de UGT Castilla y León, celebrado en Valladolid y en el que Agustín Prieto ha sido reelegido nuevamente como secretario general.
   En declaraciones recogidas por Europa Press ha criticado las explicaciones aportadas por los ministros Sáenz de Santamaría, De Guindos y Montoro el pasado viernes, quienes en su opinión ofrecieron una rueda de prensa para "decir de manera resignada e impotente" que el paro seguirá creciendo y que no bajará del 25 por ciento hasta más allá del final de la Legislatura, en 2015.
   En este sentido, ha calculado que si se mantiene ese ritmo de evolución del desempleo, se necesitarían "otros 24 años" para alcanzar una tasa del 15 por ciento, que también ha considerado "inadmisible". Por ello, ha aseverado que "no se puede seguir por este sendero por la obsesión permanente por la reducción del déficit público".
   Cándido Méndez ha rechazado que, como considera que defienden los dirigentes del PP "no hay alternativas", porque "sí que las hay" y, a su juicio, pasan por "invertir las prioridades". De este modo, ha apostado por situar en primer lugar la creación de empleo, lo que implicaría que España "empezaría a salir del hoyo", se avanzaría en la recuperación económica a través del consumo interno y "se podría resolver de manera paulatina las cifras del déficit".
   En otras palabras, ha insistido en que tanto en España como en Europa se debe cambiar "de manera radical la 'triple A' de austeridad, austeridad y austeridad" por los objetivos de solidaridad, estímulos a la creación de empleo", una austeridad "con plazos más generosos y más realistas" y crecimiento económico.
   Así, ha insistido en plantear un gran acuerdo político y social para "proteger el empleo y las pequeñas y medianas empresas" y, a medio plazo para impulsar un cambio de modelo productivo buscando alternativas distintas a la construcción de vivienda, y a la "escabechina" de las cajas de ahorro.
   En este ámbito ha animado a los sindicalistas a defender a los trabajadores que se pueden quedar sin convenio colectivo como consecuencia del decaimiento de las cláusulas de 'ultraactividad', que pueden dejar a 4 millones de trabajadores "abocados más pronto que tarde a cobrar el salario mínimo interprofesional".